domingo, 15 de mayo de 2011

Dame tiempo

Ellos nos gritan: ¡Blasfemáis!

Desde hace tiempo lo sabemos.
Desde hace tiempo lo sabemos: ¿qué importa?
Vosotros moléis en los molinos de la muerte la blanca harina de
la Promesa
y la ofrecéis a nuestros hermanos y a nuestras hermanas.

Nosotros agitamos la blanca cabellera del tiempo.

Lo sabemos. Memoria hábito que habita el presente; memoria persistente que quiero matar como a un padre tardío. Dame tiempo para sanar la migraña; tiempo de olvido o tiempo de origen. Nunca más este tiempo que sólo se solapa con tu aroma verde y fresco, con tu grano y tu hoja, con tu puerta siempre abierta. Polinízame.

Y si acaso te perdiste en el bolsillo de un ingrato camello, búscame gritando mi nombre, dame tiempo para recordar dónde olvidé la vieja promesa.

O miento.



2 comentarios:

Ico dijo...

el tiempo que borra la historia por eso nos volvemos sin memoria a repetir los mismos errores y de nuevo a ser engañados.. no mientes,.. hermoso grito de guerra..

Makiavelo dijo...

Con este ritmo asustarás a más de uno. ¡Pobrecitos!!!

Besos.